Gabrielle Bonheur, nacida en Saumur (Francia) en 1883 fue una modista francesa que revolucionó la moda y el mundo de la alta costura de los años de entreguerras. Rompiendo con la acartonada elegancia de la Belle Époque, su línea informal y cómoda liberó el cuerpo femenino de corsés y de aparatosos adornos y expresó las aspiraciones de libertad e igualdad de la mujer del siglo XX.
Coco Chanel. |
La pequeña Gabrielle, que sería conocida mundialmente como Coco Chanel, perdió muy pronto a su madre. Su padre, abrumado por la situación, abandonó a la niña en un orfanato regido por una orden religiosa, donde fue educada por las monjas, algo que ella siempre intentó ocultar, al igual que su fecha real de nacimiento.
Según distintas versiones, en torno a los 17 años abandonó el convento en el que vivía y trabajaba para convertirse en cantante de cabaret. De la mano de su amante, Etienne Balsan, un rico hombre de mundo de quien aprendió a moverse en sociedad, pronto se instaló en París donde dejó sus actuaciones para abrir su primera tienda en 1913, una sombrerería que no tardó en tener gran éxito.
Tanto, que muy pronto la diseñadora inauguró su primer taller de costura, desde el que empezó, paso a paso, la revolución definitiva del guardarropa femenino. Coco Chanel abominaba de los corsés y las estrecheces, tan en boga en su época, así que se inventó un estilo que se adpataba a las formas de vida de la mujer del siglo XX, trabajadora, independiente y emancipada, que necesitaba ropas cómodas y sobrias para ir al trabajo, un vestuario que le hiciera sentirse elegante sin dejar se ser ella misma.
El color negro, los trajes de chaqueta, las camisas blancas de líneas rectas, el pelo corto, los jerséis masculinos adaptados a la mujer, la ropa sport. Ideas que fueron saliendo de su cabeza, y la sociedad del periodo de entreguerras lo entendió e imitó. La leyenda Chanel había comenzado.
Su vida estuvo llena de avatares, amantes y desencuentros. Uno de los escándalos más sonados de su vida fue su romance con un oficial nazi, hecho que la llevó al exilio en Suiza durante la II Guerra Mundial. París, sin embargo, le perdonó su error y a su regreso, en 1954, Coco no tuvo problemas para reinaugurar su actividad con enorme éxito. Por aquel entonces la francesa presentó al mundo una de sus colecciones más esperadas, en la que lanzó su famoso traje de chaqueta Chanel. Pocos años después, cualquier mujer de relevancia social tenía uno de esos diseños en su armario. Coco Chanel murió en 1971 con las botas puestas, cuando se encontraba embarcada en la preparación de su nueva colección.
Muy interesante y curiosos esos episodios de la vida de COCO. Un saludo de ANTIGÜEDADES DEL MUNDO.
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