Mastodon Clave Menor: El corazón roto o morir de amor

Publicidad

sábado, 25 de mayo de 2019

El corazón roto o morir de amor

En una sociedad en la que las relaciones personales están en el centro de un amplio debate, sobre todo debido a su suplantación por las relaciones a través de las redes sociales, puede ser de interés conocer si todavía en los tiempos que corren se puede morir de amor.

¿Se puede morir de amor?
Los lazos afectivos que pueden establecerse con la persona que amamos pueden incluso cambiar los principios que habíamos creído firmes durante toda nuestra vida. Pero, qué sucede si esa persona a la que hemos entregado todo nos deja o fallece.

¿Podemos sentirnos morir de amor? Todo el mundo conoce historias sobre parejas que mueren con pocos días de diferencia, en su mayoría mayores, y se suele asociar esta muerte con un sentimiento de amor poderoso. Aunque en otros casos también se cree que la fuerte dependencia del uno por el otro les hace sumirse en un estado de depresión, en el que dejar de comer y cuidarse provoca el terrible final.

A primera vista es complicado encontrar una respuesta científica ante este hecho. Algunos especialistas han intentado arrojar un poco de luz sobre el tema buscando la relación entre la aflicción por la pérdida del ser amado y si estos cambios pueden reflejarse en nuestro cuerpo.

Existen estudios que dictaminan que cerca de un 40 por ciento de las mujeres y un 26 por ciento de los hombres mueren antes de que hallan transcurridos 3 años de la muerte del ser amado. Por lo que no parece erróneo afirmar que  el perder a la pareja puede tener un impacto directo sobre la esperanza de vida.

Otros expertos mantienen que las causas por las que una pareja podría morir tras el fallecimiento del ser amado podrían estar en una latente enfermedad cardíaca que se agrava con la depresión. El fallecimiento de la persona amada sacaría a la luz una situación anterior  de ansiedad y tristeza.

Parece evidente que además, para morir de amor, todo dependerá de cómo la persona que se queda sola maneje el duelo. Es decir, si adquiere hábitos nocivos que puedan agravar una enfermedad existente o si por el contrario tiene otros motivos para vivir, como hijos, nietos, amigos o un carácter que lo ayude a superar la tristeza.

Aunque también podríamos encontrarnos ante un tópico literario. Morir de amor se generalizó en la lírica provenzal como la única forma de acabar con el sufrimiento del enamorado​ no correspondido y ha seguido existiendo a lo largo de toda la Historia de la Literatura y hay muchos ejemplos de ello.
Pero, en este sentido, hay una curiosidad, excepto en algunos poemas de la lírica popular medieval en los que la mujer es la que muere de amor, la constante es que el muerto de amor sea siempre un hombre.

Pero relevantes cardiólogos afirman que la cuestión no está para tomársela a la ligera. No se trata de poesía,  morir de amor puede ser una realidad. Si una persona es víctima del síndrome del corazón roto, su vida corre peligro. Más de un especialista afirma que el “síndrome del corazón roto” o cardiomiopatía de Takotsubo presenta síntomas similares a los de un ataque al corazón.

El origen de este síndrome se basa en una fuerte descarga de catecolaminas al corazón, provocadas por tristeza, angustia o una fuerte carga de estrés. Las catecolaminas funcionan como neurotransmisores del sistema nervioso.

Visto lo visto, parece mejor agarrarse al tópico literario ¿O no?

Próximo capítulo: Llenar la España vacía






PUBLICIDAD

La investigación sigue abierta… La historia de una de las mayores fortunas de España. Lee la “La herencia envenenada del marqués de Larios”, del periodista Ramón Triviño https://amzn.to/2PVjEzb La segunda parte ya está en el horno. Y se titulará “Asesinato, masonería y franquismo



No hay comentarios:

Publicar un comentario