Mastodon Clave Menor: La historia del Ratón Pérez

Publicidad

sábado, 21 de noviembre de 2020

La historia del Ratón Pérez

 

El Ratón Pérez es un personaje de leyenda muy conocido por españoles y latinoamericanos, que saben que cuando se les cae un diente de leche lo tienen que colocar debajo de su almohada y según la tradición esa noche mientras duermen el pequeño ratoncito se lo cambiará por una moneda.


Placa conmemorativa del lugar de nacimiento del Ratón Pérez.


En la Biblioteca del Palacio Real se encuentra guardado un manuscrito que el padre Luis Coloma, sacerdote jesuita, escribió, por petición de la reina regente María Cristina, para Alfonso XIII y que está fechado en 1894, cuando el aspirante al trono tenía aproximadamente ocho años.


Pero no fue hasta el año 1902, en el momento que el rey comenzó a ejercer sus funciones con 16 años, cuando se publicó el primer cuento del Ratón Pérez en un libro que contenía ocho relatos bajo el título de Nuevas Lecturas. Y después en el año 1911 se publicó por separado una edición dedicada al principe de Asturias Alfonso de Borbón y Battenberg, hijo de Alfonso XIII.


Según se dice en la dedicatoria del autor, el cuento fue escrito para mostrar al rey la fraternidad humana, donde todos los hombres sean ricos o pobres, buenos o malos, son hermanos; además de e instruirle en su deber de proteger y velar por sus súbditos y hacer ver a los lectores de esa época la importancia de la monarquía.


La leyenda se adapta en cada cultura y es un personaje distinto el que se encarga de la tarea según el país, el Hada de los dientes en los países anglosajones, Petite Souris en Francia, Fatina Dentina en Italia y Ratai-Chi en algunas zonas de Asia Oriental.


En Cataluña tambien existe el cuento popular del Angelet (El Angelito), en el País Vasco, sobre todo en Vizcaya hablamos de Maritxu Teilatukoa (Mari la del tejado) y en Cantabria de L´Esquilu de los dientis (La Ardilla de los dientes).


En resúmenen el cuento se señala que el pequeño Ratón Pérez vivía dentro de una caja de galletas en el almacén de la confitería Prast, en la calle Arenal número 8 de Madrid, y desde ahí todas las noches se recorría la ciudad, esquivando a los gatos , visitaba las casas de los niños pobres a los que se les había caído un diente y dejaba a cambio de ese diente una moneda bajo la almohada.


Todavía de puede visitar la Casa Museo del Ratón Pérez que se encuentra en el mismo lugar en el que el padre Coloma situó la vivienda del personaje, en la calle Arenal , número 8 , 1ª planta en Madrid; allí se puede ver en la fachada la placa que el Ayuntamiento de Madrid dedicó al Ratón Pérez.


No hay comentarios:

Publicar un comentario